6.1 Función gramatical de la música

En el vocabulario del lenguaje sonoro la música tiene ocho funciones gramaticales: de identificación, cortina, puente, ráfaga, golpe tema, leitmotiv[10], y de salida o cierre, Emilio Cisternas[11] las explica así:

Rúbrica de entrada.
También llamada de identificación, apertura o introducción de programas o series.

Cortina musical.
Similar a la función de un telón en un teatro, separa un acto de otro, aquí separa una parte de otra del discurso, cuando se expresan ideas diferentes, cuando la acción se traslada de un lugar a otro; cuando hay transcurso de tiempo, podría compararse con un punto y aparte. Para ello se emplea un fragmento musical, previamente escogido, que no debe pasar de los diez segundos de duración y tiene que estar de acuerdo con el tipo de programa.

Puente musical.
Su función es unir escenas, acciones o ideas. En teatro sería el apagón de luces que permite el cambio de cuadro o escena. El puente podría ser el punto y seguido en una narración. Es una especie de intermedio musical al que se le da más importancia que a la cortina.

Se emplea generalmente para sugerir un transcurso largo de tiempo entre una escena y otra o para insinuar que la acción se transporta a un sitio diferente al anterior. El puente se aprovecha al disminuir su volumen para enmascarar los párrafos de narración y puede también anticipar la escena siguiente cuando se mezcla con la escena de esa escena. Su duración tiene un promedio de veinte segundos.

Ráfaga.
Es una especie de puente que une pero su diferencia radica en que el corte es muy rápido y casi siempre repetitivo en su estructura melódica. Su duración se estima en unos cuatro segundos. La ráfaga vendría a ser una especie de punto y coma. Se utiliza para reforzar un diálogo que define una situación, o para llamar dinámicamente la atención del auditorio. Por lo general, se emplea en noticiarios para enlazar una noticia con otra.

Golpe musical.
Es como un signo de exclamación que realza el momento clave en la acción. Lo que pretende es remarcar y hacer sobresalir una parte de la trama.

Tema musical.
Una melodía o una canción se convierten en tema musical que identifica a un personaje o a una producción en la medida que se emplee para ello, con la salvedad de que nadie antes la haya empleado con el mismo fin.

Leitmotiv.
Es un tema musical compuesto especialmente para una producción o un personaje, por ejemplo: la banda sonora de las películas y los temas musicales de telenovelas. La fanfarria muchas veces sirve para este fin, se trata de un fragmento de música de instrumentos de percusión y metales para anticipar escenas heroicas o situaciones festivas.

Música de salida.
Tiene como fin recordar al auditorio la trama de la producción de la película, serie o programa y motivarle a que la identifique. Puede ser la misma música de la entrada o una variante de la misma.

[10] Leitmotiv.- Palabra germana que significa “motivo conductor o principal” y se utiliza desde tiempos de Wagner para identificar un tema musical asociado a determinado personaje. Hoy en día se aplica, por extensión, a cualquier frase, idea o situación que se repite, incluso en trabajos de índole literario, musical, pictórico, etc. El origen de las palabras. Ed. Muy interesante, México 1996.
Leitmotiv.- Locución latina para designar el “motivo recurrente”, como factor de reconocimiento para el espectador frecuente fundamental, de una obra, muy utilizado como tema musical en el arte cinematográfico por su tensión melódica, rítmica y armónica que tiene un gran poder de evocación en la audiencia al repetirlo, evolucionando. La misma función puede desempeñarla una imagen, una palabra o una frase. De la Mota Ortega, Ignacio (1998:280) Diccionario de la Comunicación Audiovisual. Trillas, México

[11] Cisternas Peña, Emilio (1989) La Música en los medios, en Manual: Educación de la Voz y Técnicas de guionismo. Tepochalli, México.